miércoles, agosto 31, 2011

Budapest - Finale
















Manuel
#803

La Puerta del Sol


La Puerta del Sol es noticia.
Primero el 15-M, luego la JMJ.
Lo que ahora mismo no ocurra en la Puerta del Sol no está ocurriendo de verdad.
Ha pasado de ser ese lugar que huele a las ensaimadas de la Mallorquina, el kilómetro cero donde se citan los recién llegados a Madrid, la plaza en que no se sabe bien dónde colocar el Oso y el Madroño, donde se compra oro, el hogar del Tío Pepe, ha pasado de ser una plaza que se cruza deprisa hacia alguna parte, la más pateada, nada bonita, imposible de mejorar, pero muy capaz de empeorar cuando se intenta embellecerla y modernizarla (una tarea imposible porque no lo necesita, su función es que haya un punto en que nadie se sienta extranjero, en que no le abrume ni empequeñezca el entorno, sino que lo pueda dominar), ha pasado a convertirse en la más codiciada, la que todos quieren conquistar.
Porque tomar la Puerta del Sol es como hacerse con la esencia de esta ciudad, que es su gente, la calle, lo popular, el día a día, la vida.
Pero no es tan fácil, no basta con ocuparla, hay que estar con ella, hay que escucharla, comprenderla, sentirla. Hay que sintonizar con su caótico espíritu (nunca se sabe lo que está sucediendo a nuestro alrededor) y al mismo tiempo familiar.
Una plaza a la que los cambios estéticos y humanos en el fondo no la cambian.


La Puerta del Sol ni siquiera tiene puerta, la entrada a su mundo es invisible.
No es comparable a la nostálgica Puerta de Alcalá o la Puerta de Toledo, que hace tanto dejaron de ser entradas reales a la ciudad y que ahora resultan extrañas, ahí, en medio del tráfico y fuera de su tiempo, sin ningún uso, sin saber ya qué mundo había delante ni cuál detrás.
Piezas sueltas y solitarias de nuestro viaje en el tiempo.
Y por eso mismo, al pasar por debajo, se tiene la sensación de que va a ocurrir algo fuera de lo normal.

CLARA SÁNCHEZ 28/08/2011

Manuel
#802

El Poder



El poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente.
Lord Acton (1834-1902) Historiador inglés.

La prueba suprema de virtud consiste en poseer un poder ilimitado sin abusar de él.
Thomas Macaulay (1800-1859) Historiador y político británico.

Agradezco no ser una de las ruedas del poder,
sino una de las criaturas que son aplastadas por ellas.
Rabindranath Tagore (1861-1941) Filósofo y escritor indio.

Con un poder absoluto hasta a un burro le resulta fácil gobernar.
Lord Acton (1834-1902) Historiador inglés.

El primer arte que deben aprender los que aspiran al poder
es el de ser capaces de soportar el odio.
Lucio Anneo Séneca (2 AC-65) Filósofo latino.

Si queréis conocer a un hombre, revestidle de un gran poder.
Pitaco de Mitilene (650 AC-?) Gobernante griego.

El poder es como un explosivo: o se maneja con cuidado, o estalla.
Enrique Tierno Galván (1918-1986) Político e intelectual español.

Al hombre que hace todo lo que puede no podemos decirle que no hace todo lo que debe.
Fray Antonio de Guevara (1480-1545) Escritor y eclesiástico español.

Para quienes ambicionan el poder, no existe una vía media entre la cumbre y el precipicio.
Tácito (55-115) Historiador romano.

El poder sin límites, es un frenesí que arruina su propia autoridad.
Fénelon (1651-1715) Escritor y teólogo francés.


Manuel
#801

sábado, agosto 27, 2011

Logos



This logo appears to be very simple,
but if you look at the white space between the "E" and "x" in “Ex,"
you'll find it is more complex than you thought.
Can you spot the arrow?


These popular party chips are a staple at many backyard BBQs, but chances are,
you've never noticed the hidden celebration scene concealed within the letters.
The second and third "t’s" are sharing a chip over an "i" that is dotted with a salsa bowl. Yum!



Named the world's most famous and prestigious cycling race,
bike-lovers and non-cyclists alike are familiar with the event's emblem.
However, you might be missing out on the logo's most interesting aspect.
After careful examination, you'll notice an image of a person riding a bicycle;
the yellow circle is the front wheel and the r is the body.



The name of this French international retail chain translates to “crossroads,”
or “intersection” in English.
The two arrows pointing in opposite directions indicate this,
but there’s also a big C hidden in the white space.



Amazon.com has become a go-to source for electronic commerce.
Clearly there is an arrow under Amazon, but have you ever thought about its significance?
Take a look at where the arrow begins and ends: a and z.
This secret message seems to conveys that Amazon offers everything from A to Z!



There’s a slightly obscured bear within the Matterhorn Mountain if you look closely.
That’s because the candy bar hails from Bern, Switzerland, a city supposedly named for a bear.



The seemingly simple design is both an acronym for the London Symphony Orchestra
and a conductor conducting with a baton in his right hand.
Neat, huh?


Manuel
#800

Cinema x3


L'Affaire Farewell est un film basé sur l'affaire du même nom
dans laquelle l'espion soviétique Vladimir Vetrov fut agent double au bénéfice de la DST.
Le film est toutefois très romancé par rapport à la réalité.



Les Petits Mouchoirs est un film réalisé par Guillaume Canet.



Rise of the Planet of the Apes is a 2011 American scien-fiction film.
It is a reboot of the Planet of the Apes series.
It is intended to act as a foundation with its own origin story for a new film series.
Its premise is similar to the fourth film in the original series,
Conquest of the Planet of the Apes (1972),
but it is not a direct remake in that it does not fit into that series' continuity.



Manuel
#799

Credibility






Manuel
#798

El dedo en el ojo del Real Madrid

Javier Marías, probablemente el mejor escritor madridista del mundo, opinó en El País Semanal hace unos meses que José Mourinho era "un individuo dictatorial, ensuciador y enredador, nada inteligente, mal ganador y mal perdedor".
Me atreví a pensar en su momento que Marías había ido demasiado lejos.
Eso de que el entrenador del Real Madrid era "nada inteligente" me pareció un pelín exagerado.

Ya no.
Un comunicado de Mourinho publicado en los medios ayer nos informó de que no se arrepentía de sus agresiones cobardes y declaraciones infantiles al final del partido de Supercopa que su equipo perdió contra el Barcelona el miércoles pasado; y mantuvo que hizo todo lo que hizo con el noble motivo de defender al Madrid. Imbecilidad se suma a imbecilidad y las pruebas se vuelven irrefutables: no solo es un ensuciador, enredador, mal perdedor y todas las demás cosas que ya sabíamos, sino que el tipo es algo peor.

Yo me imaginé que durante el parón veraniego Mourinho reflexionaría sobre su papel público.
O que alguien en el Madrid hubiera tenido las agallas para aconsejarle que bajara un poco el tono. No por cuestiones morales.
No para dar un mejor ejemplo a la juventud, o para intentar recuperar el famoso "señorío" del club, cuya imagen mundial se ahoga en las cloacas sin que nadie pareciera darle mayor importancia.
No, no. Por motivos puramente pragmáticos.

¿Cuál es el reto más grande al que se enfrenta el Madrid de Mourinho?
Bajar al Barça de su pedestal.
¿Cuál es el principal reto del Barcelona de Pep Guardiola esta temporada?
No perder el hambre competitiva de un equipo saciado de gloria.

¿Y qué hace Mourinho?
Pues le da un regalo a Guardiola. El regalo más deseado.
La motivación que necesitaban Messi, Iniesta, Xavi y compañía para que siguieran con las ganas, hasta mayo o más allá, de meterle el dedo en el ojo al Madrid.

Mourinho debería de saber mejor que nadie que no hay motivador más poderoso que el rencor, el combustible que lleva a naciones a declarar guerras y a individuos, incluso los mediocres, a triunfar.
Sin embargo, fue el propio Mourinho el que le ha inyectado el rencor en las venas a los jugadores del equipo menos mediocre del planeta, alimentando sus ánimos de venganza.

Mourinho sabrá mucho de táctica, pero no es un estratega.
Tendrá experiencia y títulos, pero es un niñato.
Será listo, pero no es inteligente.
Javier Marías lo pilló antes que nadie.

JOHN CARLIN 23/08/2011

Manuel
#797

sábado, agosto 20, 2011

El hechizo de La Pulga

Al Madrid le pasa más o menos lo mismo que al Manchester. Ambos son víctimas de Messi.
La web del club inglés celebró la victoria del United contra el Barcelona en la gira por Estados Unidos con un célebre titular: "No Messi, no problem".
La Pulga ha marcado las diferencias desde su reaparición en la Supercopa.
Muy certero en la ida, estuvo excelso en la vuelta, indetectable e imposible para el equipo de Mourinho. El conjunto trabaja para el argentino y Messi labora para el altruismo azulgrana.
Hay un único ego en un plantel altruista.

Alrededor de La Pulga, el fútbol se organiza de manera natural y adquiere su mayor virtuosismo.
Ayer resultó capital para desequilibrar un muy buen encuentro por la tensión competitiva, el contraste de estilos y el poderío de las alineaciones. La liturgia le acercó en muchos momentos a una final de la Champions.
El resultado fue también el más conocido: ganó el Barça con una asistencia y dos goles de Messi, que suma 13 en 15 clásicos, así que, tras evocar a Di Stéfano, ahora recuerda a Puskas.

El Madrid ha perdido el miedo a jugar contra el Barcelona, circunstancia que se agradece, porque sus partidos remiten a la cancha, y no solo a su impacto mediático y a la organización, a cuantos factores le rodean, como ocurría el año pasado.
El fin ya no justifica los medios como presumía antes Mourinho, ahora mismo más entrenador.
Los madridistas aspiran a que los azulgrana dejen de ser su obsesión para convertirse en su rival en el campo. Su declaración de intenciones en la Supercopa ha sido estupenda por la determinación con la que ha ido en busca del Barcelona, por su empeño en tener la pelota, por su afán de imponer su jerarquía.

A partir de una admirable condición física, planteó los dos partidos con una agresividad bien entendida, muy exigente con los futbolistas, que precisan tener la pierna fuerte, mucho carácter y nada de romanticismo. El suyo es un fútbol de trazo grueso, duro y tremendo, más ajustado que nunca con la filosofía blanca de toda la vida por irreductible, muy difícil de combatir, también para el delicado y sutil Barça.

Al Barcelona hay que agradecerle que sea siempre reconocible, es igual que llueva o haga calor, independientemente de su alineación, tanto da el torneo. No repara en el adversario para desplegar su juego suave, especialmente agradable. La mecánica de su juego siempre es la misma y sus automatismos son ya de tanto dominio público que los jugadores quedan retratados para bien o para mal.
Ha quedado claro que todavía no está en plena forma y, por otra parte, continúa siendo demasiado agradecido en las jugadas de estrategia o episódicas, acciones que no siempre son consecuencia del fútbol sino de las circunstancias y sobre todo de su particular manera de ser, la misma que le impide patear la pelota en su área y le condena por un fuera de banda o un córner, y, por el contrario, le da grandeza con goles como los de ayer en el Camp Nou, sobre todo el segundo, en que se constató que Piqué es el único central del mundo que taconea en las dos áreas.

Aunque admita matices y acepte variaciones, el hilo conductor de la narración azulgrana siempre es el mismo: Guardiola-Xavi-Messi. Retrasado como va el equipo en su preparación, el entrenador recuperó la alineación de Wembley, una señal de respeto al contrario y por extensión al torneo. No era un partido más, y tanto el técnico, como Messi lo sabían muy bien.
La competitividad de La Pulga fue tan decisiva como la solidaridad colectiva para defender el botín conseguido y de nuevo reconquistado después del empate a dos, ya con Cesc el debutante en la cancha, cambio que permitió a los azulgrana cuadrar el partido perfecto.
Muy entero como equipo, al Madrid le sobraron por un lado Pepe y por el otro Messi, ambos excesivos en lo malo y en lo bueno, puntos extremos de una noche futbolística estupenda.
La jeraquía del Barça sigue a salvo con La Pulga y Guardiola ya suma tantos títulos como Cruyff: 11.

El Madrid fue un equipo grande cuando intentó ganar y muy pequeño cuando no supo perder, con Mourinho de nuevo en versión camorrista.


Manuel
#796

Los pecados del Vaticano

Me ha causado un cierto estupor saber que se han colocado cientos de confesionarios en el parque del Retiro de Madrid con motivo de la visita del papa Benedicto XVI.

Es el mismo estupor que me causaban los confesionarios colocados en las fábricas de Polonia por el sindicalista Lech Walesa. Son esos confesionarios los que, con razón, indignan a los indignados, mientras a ellos tratan de impedirles que confiesen su indignación.

El Papa, que tendría que encarnar la figura de Pedro, el pobre pescador de Galilea, como obispo de Roma, debería recordar al viajar a Madrid que el apóstol llegó a Roma perseguido y que fue crucificado como el Maestro. No tuvo honores de jefe de Estado, ni salvas de cañón, ni papamóvil, ni fue escoltado por los guardias romanos; y fue enterrado al morir en un cementerio común.
El Vaticano se construyó más tarde, y sobre él pesa un rosario de pecados.

No sé de qué se confesarán los miles de jóvenes que se arrodillarán en los confesionarios improvisados del Retiro, aunque puedo imaginármelo, ya que la Iglesia inyecta en los jóvenes católicos la obsesión por el sexo más que por la justicia o por la libertad.
Pero sí sé, por haberlo vivido de cerca, los pecados de los que el Papa y sus seguidores vaticanos, recibidos con honores de reyes con un presupuesto de millones de euros pagados por los españoles en crisis, podrían y deberían confesar.

El Vaticano, el minúsculo Estado enclavado en Italia, regalo de Mussolini al Papa a cambio de los votos de los católicos al fascismo, es la mayor anomalía e irreverencia para aquel Jesús que decía que "no tenía donde reclinar la cabeza", que rechazó ser coronado rey y que murió en la ignominia de la cruz.
La prerrogativa de jefe de Estado otorgada al Papa de Roma es un pecado contra los evangelios.

Las oscuras finanzas vaticanas, su Banco del IOR que estuvo tristemente implicado en escándalos de corrupción, su vinculación con mafias y masonerías heterodoxas que dejaron un reguero de cadáveres de por medio y a monseñores huyendo perseguidos por la justicia, son otros pecados todavía sin confesar y sin penitencia,

El ocultamiento de los ya tristemente casos de pedofilia del clero en todo el mundo, porque la Iglesia se avergonzaba de aceptar lo que hicieron los suyos e intentó ocultarlo durante años, es un pecado aún sin arrepentimiento y sin confesión abierta.
Es un pecado tan grande que el pacífico profeta de Nazareth llegó a pedir para él la pena de muerte. Pedía que al que abusara de un menor "se le colgase una rueda de molino al cuello y se le arrojase al mar".

La imposibilidad de la mujer de acceder al sacerdocio -la más persistente discriminación femenina en el mundo de las democracias- es un verdadero pecado contra el mismo Cristo, que se rodeó de mujeres durante su vida apostólica, que se le apareció después de muerto a una mujer antes que a Pedro y a los otros apóstoles y que en las primeras comunidades creadas después de su muerte para continuar su mensaje eran, también ellas, sacerdotisas y obispas.

Otro pecado del Vaticano es su terquedad en seguir manteniendo obligatorio el celibato sacerdotal a pesar de todos los escándalos de abusos de menores por parte del clero, y a pesar de que los apóstoles, y seguramente el mismo Jesús, estaban casados, como lo estaban los primeros papas y los obispos de los primeros siglos de la Iglesia, a los que solo se les pedía dar buen ejemplo conformándose con una sola mujer.

Así como también es pecado condenar todo tipo de sexualidad que no esté directamente encaminada a la procreación, cuando Jesús nunca habló de pecados contra el sexo.

Sí, en cambio, habló y gritó contra los que oprimen a los pobres, contra los sacerdotes hipócritas que predican una cosa y la contradicen después con su vida y contra los poderes y tiranías de la tierra. Llamó "zorra" al emperador Herodes.
Y fue víctima del poder romano que lo condenó a muerte sin pruebas.

Son pecados todas las exhortaciones del Vaticano contra el derecho de la mujer de decidir en conciencia sobre su maternidad.

Es pecado defender la doctrina del infierno eterno ya que, como dicen los teólogos más iluminados y modernos, o existe Dios o existe el infierno. Juntos no pueden existir, porque ni el padre más brutal y vengativo sería capaz de condenar a un hijo a un castigo eterno sin posibilidad de retorno. El infierno sería la mejor prueba de la no existencia de Dios.

Cada vez que el Vaticano se opone a los avances de la ciencia que liberan al hombre de sus servidumbres, desde el uso de las células madre al derecho a morir con dignidad, peca contra la vida y contra el derecho a la libertad del ser humano.

Y como fueron pecados la Inquisición y las Cruzadas, lo son también hoy la cacería desatada contra teólogos que no razonan como el Vaticano, cacería de la que fue artífice el actual Pontífice desde su puesto de presidente de la Congregación para la Doctrina de la Fe, heredera de la antigua Inquisición.

Es pecado condenar a los que se empeñan en resucitar las palabras duras del Evangelio y en apoyar los abusos perpetrados por la Iglesia contra las conciencias.

Una de las frases más misteriosas y oscuras del Evangelio es la pronunciada por Jesús cuando afirma: "Dejad que los muertos entierren a sus muertos".
A él le interesaban los vivos más que los muertos.
Pero al Vaticano parece dolerle la felicidad de los vivos, prefiere el dolor, el sacrificio, la abnegación, el martirio, la muerte, es decir, la teología de la cruz en vez de la teología de la felicidad que era la que predicó hasta la saciedad el profeta maldito, que no soportaba el dolor y por eso "curaba a todos".
Y multiplicaba no solo el pan para saciar el hambre de los pobres sino el vino para no arruinar la fiesta de unas bodas.
Jesús no fue ningún asceta, ni predicó nunca el dolor como terapia de la fe.

El gran pecado del Vaticano, de esa Iglesia oficial que no acaba de liberarse del poder temporal que no le corresponde, es su miedo a que los hombres sean felices, porque es la felicidad, y no la angustia ni el sufrimiento, lo que terminará por hacer libres a las mujeres y a los hombres.
De ese pecado debería no solo confesarse, sino pedir perdón a toda la humanidad.


Manuel
#795

Protesta cívica contra la JMJ

Si la manifestación laica que recorrió Madrid y a la que acudieron miles de personas fue una "provocación", según Ana Botella, la número dos del Ayuntamiento, en la ciudad han aflorado esta semana muchas otras pequeñas "provocaciones" ciudadanas de forma improvisada.
Algunos madrileños han reaccionado contra el fervor católico que ha tomado las calles en forma de peregrinos con sus propias rebeliones cívicas.
Son actos de protesta pacífica con los que tratan de demostrar que no todos están de acuerdo con la visita de Benedicto XVI.

"Hay problemas más importantes a los que la Iglesia podría destinar el gasto de la JMJ", dice Mili Hernández, propietaria de una librería en el barrio de Chueca que ha llenado su escaparate de ejemplares del libro Dios no existe.
"Queremos decirle al Papa que la sociedad española decide sus leyes en el Parlamento", asegura Miguel Ángel Sánchez, de la fundación Triángulo, que ha convocado una concentración el sábado en defensa de todos los modelos de familia.

Manuel
#794

Dedo en el ojo


No hay tiempo.
Ha llegado el momento más importante de la presidencia de Florentino Pérez, el precursor de la evangelización del madridismo, el patrón de la excelencia, el guardián del señorío.
A él le corresponde, sin demora, pregonar si el Real Madrid quiere ser el Real Madrid de sus palabras o el Estudiantes de la Plata, símbolo eterno del fútbol camorrista y pendenciero.
Ni más ni menos que el que, premeditadamente o no, parece preconizar José Mourinho, elevado a consejero delegado del club por el propio Florentino Pérez.

La Supercopa, tanto en la ida como en la vuelta, le ha desenmascarado.
En la ida, en un imaginario berrinche contra un árbitro que bendijo la marcialidad madridista, montó otro esperpento de ventriloquia, con Karanka cargando en portugués en la rueda de prensa.
En Barcelona, desquiciado por Messi, que no es árbitro, que se sepa, se retrató ante Tito Vilanova, el segundo de Pep Guardiola, al que agredió de forma cobardica y luego, lejos de disculparse, faltó al respeto con aire de pavo real: "No sé quién es ese Pito Vila...".
Lo más mesurado de Mou fue no acusar a Vilanova de hacer teatro y meterse él mismo el dedo en el ojo.
Tampoco pidió su expulsión ni culpó a Unicef o al villarato de conspirar a favor de Tito.

Nadie, y mucho menos el Real Madrid, puede tolerar estos desplantes.
Máxime cuando no son excepcionales.
Es hora de que el presidente se posicione en público y aclare cuál es su nuevo guión.
Si tiene que ver con su discurso o con su obra.
Del primero se conoce su verbalización, pero sus hechos pasan por dar vuelo a un técnico que ha envilecido a la institución a la vista de todo el universo.
Y lo ha hecho, más que nunca, en cuanto su mecenas presidencial le ha dado barra libre.
Mourinho quizá se lo pueda permitir; el Real Madrid, no.
Pero eso es decisión del presidente.
Por cierto, el único representante del equipo que asistió con deportividad al exitoso protocolo del Barça. Sus técnicos y jugadores dieron la espantada sin felicitar al campeón, lo que sí hizo el cuadro azulgrana tras la victoria madridista en la última Copa del Rey.

El mal perder del Madrid no tiene precedentes en su historia y para quienes rebobinen con los años quedará tanto quién era el entrenador como quién le empleaba, un mandatario que llegó para reinar en la galaxia no para ser cómplice de los bajos fondos del fútbol en los que rema Mourinho.
Nada que ver con el dogma de Florentino Pérez y la centenaria y gloriosa historia del club.
En esta heráldica entidad todos están abducidos por el mourinhismo, desde el palco hasta el vestuario. No sería malo si el técnico hubiera hecho prevalecer sus sobresalientes deportivos, que los tiene, pero no ha sido así.
En Mourinho no se anticipan sus dotes de buen entrenador, que lo es, sino su corrosivo guiñol, que no solo le devora a él, sino a toda la institución que representa.
Y lo que es aún peor: España, su selección, está rajada.
En su tozuda cruzada por las cloacas, Mourinho ha logrado arrastrar a sus propios jugadores, socavando así el ecosistema de la mejor selección española que haya existido jamás, y de la que puede que ya solo queden cascotes.
Tal es el clima que la alevosa patada final de Marcelo a Cesc fue mourinhizada de inmediato por el capitán Casillas ante las cámaras de TVE: "Se ha tirado al suelo... Lo de siempre". Increíble.
Y todo tras una considerable bronca anterior de Iker con Xavi, con quien ha compartido más de 100 internacionalidades.
Curioso, pero entre la militancia el más disidente ha resultado ser Cristiano Ronaldo, de los pocos que han pasado sin tachas por la serie de los seis clásicos, y el único que fue capaz de criticar un planteamiento del entrenador, justo tras el partido de ida de la eliminatoria de Liga de Campeones.
Que no distraiga su aire de chulapo, CR, la megaestrella del equipo, no ha merecido ningún reproche extradeportivo.

Nada justifica, ni ahora ni el curso pasado, la actitud de Mourinho, un privilegiado que cobra como nadie al frente de la entidad más titulada del universo.
Mou tiene motivos para corregirse: es un avanzado en su campo, tiene una plantilla fascinante y le ampara el club más extraordinario que jamás pueda entrenar (el Barça no parece posible).
Sí, una entidad entregada a su causa, pero debiera ser a la causa estrictamente deportiva, no a su grosera travesía por los suburbios de este deporte.
Sus amarguras y complejos acaban por transformar a un equipo magnífico en un equipo ulceroso. Este Madrid no necesita envenenarse.
Desde lo futbolístico ya es capaz de discutir con el Barça como nadie puede hacerlo.
Y el mérito es de Mourinho y sus futbolistas.
Pero lejos de profundizar en ese positivismo, el técnico arrastra a los suyos -y de paso a la institución- por el barro de sus obsesiones y complejos sin fundamentos.

Florentino Pérez tiene la palabra. Sin zidanes, pavones y valdanos, esta es su obra.
Que se aclare en público con el fin y los medios. A él le han metido el dedo en el ojo de Tito Vilanova. Para consuelo de Florentino Pérez, en el Estudiantes de la Plata aún era peor.
El equipo que dirigía Osvaldo Zubeldia, en el que se alistaban Aguirre Suárez, Pachamé, Hugo Medina y Bilardo, entre otros, pinchaba a los rivales con alfileres, según denunciaban sus adversarios. Y con argucias peores hasta ganó una Copa Intercontinental al Manchester United.
Pero nadie le proclamó jamás el mejor club del siglo XX.
Y si el Madrid, digamos Mourinho, se pregunta por qué, bien fácil tiene la respuesta: el fútbol, su gente, siempre prefirió a los messis o cristianos antes que a los alfileres.



José Mourinho no ignora a estas alturas que cuando agredió a Tito Vilanova, segundo entrenador del Barcelona, estaba metiéndose un dedo en el ojo propio.
Eso no importaría tanto si no fuera porque, sobre todo, estaba metiéndole un dedo en el ojo al prestigio del Real Madrid.

El entrenador del club blanco perpetró esa acción en los últimos minutos de un partido espléndido, en el que el fútbol de su equipo, enfrentado al campeón de Europa, el Fútbol Club Barcelona, fue una lección soberbia de eficacia en la organización del juego.

La belleza del partido quedó ensombrecida por algunas acciones de sus futbolistas, y sobre todo por un patadón de Marcelo al debutante Fábregas. Ese patadón, y el correspondiente correctivo del árbitro, una tarjeta roja, fue el inicio de una tangana monumental cuya confusión le dio a Mourinho alas para meterle el dedo en el ojo al segundo de Guardiola.

En la posterior conferencia de prensa, cuando ya habían pasado muchos minutos de esa agresión y pudo haber reflexionado sobre ello, Mourinho añadió sal a la herida, ninguneó a Vilanova, sobre cuyo nombre y apellido titubeó de manera insultante, y unió el menosprecio al rival a la vanidosa autocomplacencia que lo distingue como preparador egocéntrico de un excelente equipo de profesionales.

No hubo arrepentimiento alguno.
Su conferencia de prensa fue un constante ataque subliminal al ganador del campeonato; en contra de lo que dicen muchos de los seguidores del Real Madrid, insinuó otra vez el entrenador del equipo blanco que fueron artes poco ortodoxas las que llevaron a su conjunto a la derrota.
Mourinho ya ha sido apercibido por altas instancias del fútbol europeo por conductas impropias precedentes.
Ahora, su propio club, que le ha otorgado todo el poder para hacer y deshacer a su merced, debe reflexionar sobre si esa es la imagen que quiere dar a sus muchos aficionados y al mundo.
La vergüenza de Barcelona es una agresión al Real Madrid, no solo a Tito Vilanova, y esa agresión la ha perpetrado alguien que debiera defender el señorío del equipo que se le ha confiado.
Pero él no quiere sentirse madridista.
Él prefiere ser esclavo de su ego antes que servidor de su equipo.


Manuel
#793

lunes, agosto 15, 2011

Snow falls in Auckland for first time in decades



Snow has fallen in downtown Auckland for the first time in 80 years as a 'once in a lifetime' polar blast spreads across New Zealand.
Widespread reports of snow emerged this afternoon as bitterly cold and stormy conditions set in around Auckland.
Snow will settle at heights of 200m and fall to 100m in Auckland overnight.

Manuel
#792

domingo, agosto 14, 2011

Budapest - Bridges


Días 22-24 de Julio











Manuel
#791

El valor de un ser humano

Un joven discípulo preguntó a su maestro:
"¿Cuál es el valor de un ser humano?".

El sabio sacó un diamante del bolsillo y le dijo:
"Ofrece esta piedra a diferentes comerciantes del mercado y me cuentas qué tal te ha ido".

Primero entró en una frutería, y el frutero le dijo:
"Te lo cambio por un racimo de uvas".
Más tarde, un carpintero le dijo:
"Te ofrezco tres trozos de madera".
Fue a una bisutería, donde le cambiarían cien monedas de oro.
Y finalmente, el discípulo visitó la mejor joyería de la ciudad.
El joyero afirmó:
"Me encantaría poder comprártelo. Pero este diamante es tan valioso que no tiene precio".

El joven regresó con la piedra preciosa y le explicó a su maestro lo que le acababa de ocurrir.
Sonriente, el sabio concluyó:

"Al igual que sucede con esta piedra, para el que sabe ver,
el valor de un ser humano es inconmensurable".

Manuel
#790

Rare weather forecast for Auckland

Snow falling across the country has trapped about 100 people in their cars north of Wellington and made roads impassable around the capital and Dunedin.
A polar blast sweeping up the country, this afternoon brought snow to the South and lower North Island and conditions are expected to get worse overnight.

The Antarctic blast could bring snow showers to Auckland with snow expected to fall on tops of mountain ranges.
Snow showers down to 200 metres, 100 metres lower than when it snowed in July, which is a rare forecast for the city of sails.
This would see snow falling and possibly settling on the tops of the Waitakere and Hunua ranges and right across the Coromandel Peninsula.
At a height of 186m, State Highway 1 over the Bombay Hills shouldn't be affected, however the chance of snow flakes falling during showers could still occur.
A heavy fall of hail is expected across the city and will be a danger for Auckland motorists, along with winds gusting at over 100km/h.
The hail fall will pick up on Monday afternoon and overnight with the possibility of sleet at sea level in isolated pockets.
The city could reach temperatures as low as 10 degrees Celsius on Monday and possibly drop to 9 on Tuesday.


Manuel
#789

sábado, agosto 13, 2011

Queda Bollywood, no París

Que no nos quieran en Europa -la última zancadilla ha sido francamente ruin: un ataque al chocolate con churros y al infernal café fuerte de las mañanas en Der Spiegel- es la puntilla a nuestros males.
Los españoles, cuya militancia europeísta ha despertado una pasión propia de los amores otoñales, están tragando la crisis sin masticar y, con ella, sorbos de quina: el desaire de los hermanos mayores que viven pasados los Pirineos.
Ya no nos quedan París ni Berlín, más preocupados por salvar sus propios muebles que por apuntalar en firme la casa europea.
Pues bien, respiren.
No todo son Bolsas en el abismo, recortes sociales y derrotismo político.
En algún lugar del mundo arrasamos.
Aunque sea con lo de siempre: lunares y guitarra.

María del Mar Fernández, cantaora gaditana, es la autora de la canción del verano en India: Señorita, uno de los siete temas de Zindagi na milegi dobara (Solo se vive una vez), una superproducción de Bollywood.
El filme es una suerte de Resacón en Las Vegas, aligerado de las delirantes salvajadas del guion de Todd Phillips. Después de comprometerse, Kabir decide despedir su soltería con un viaje con sus dos mejores amigos del colegio, Imraan y Arjun.
¿Destino? España.
Los tres amigos se sumergen en el habitual mar de tópicos festivos y veraniegos.
Entre tomatazos, toros, flamenco y Gaudí, encuentran el sentido de la vida y una chica de ensueño.

El colofón es puro Bollywood coreográfico, con los tres galanes indios contoneándose al ritmo de Señorita, cantada en hindi y español. El videoclip se rodó en Alájar, minúsculo pueblo del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche (Huelva) con más robles que habitantes. Casi la mitad de la población -incluida su alcaldesa de entonces- baila tras los divos de Bollywood una suerte de danza local (de Calcuta) vestidos con los volantes locales (de Alájar).
En India arrasa.

La película, una de las más taquilleras del año, ha puesto de moda a España.
En las radios suena María del Mar Fernández, que recibió mil euros por su trabajo, y en los móviles se puede jugar a la Tomatina de Buñol.
Nota de producción: la película cuenta con el patrocinio de Turespaña.

No van descaminados.
Los turistas del futuro vendrán de países emergentes como China e India.


Manuel
#788

Budapest - Parlament


Día 7 - Viernes 22 de Julio















Manuel
#787